lunes, 31 de octubre de 2016

Barones, Nobleza y Forrest Gump


El sudoku ya está resuelto. Tras dos convocatorias electorales y 300 días en funciones Mariano Rajoy es de nuevo Presidente. Desgraciadamente.

Pedro Sánchez reconoció ayer en la entrevista con Jordi Evole que intentó formar un gobierno alternativo al Partido Popular, pero el grupo Prisa se opuso. Curiosamente un grupo de opinión que ha mantenido durante muchos años la bandera de la izquierda. Pero los tiempos cambian. La deuda del grupo Prisa con los medios financieros es impresionante y uno de los sus máximos dirigentes Juan Luis Cebrián ha sido descubierto en los papeles de Panamá. Sin embargo, sigue influyendo. Antes del lado de la izquierda, ahora al lado del dinero. Las deudas son las deudas, y se pagan. Sobre todo si habiéndote pillado con las manos en la masa quieres seguir jugando a ser influyente e impune en una sociedad corrompida desde el poder y donde el partido que gobierna está implicado "hasta las cachas".

sábado, 1 de octubre de 2016

No al Metro hasta el Aeropuerto


Mi primera intención fue titular este artículo “Metritis y Aeropuertitis”. Pero, cuando hablamos de inversión pública y son muchos los millones de euros que están en juego, creo que es mejor no andar con rodeos y decir claramente lo que se piensa.

Efectivamente, hay mucha parte de la opinión pública localista que sufre de “aeropuertitis”. Es decir, de la “enfermedad” de proponer la construcción/ampliación de aeropuertos sin tener en cuenta las necesidades reales la población que teóricamente se vería beneficiada de la nueva infraestructura. Ni mucho menos aún, el coste que para las arcas públicas entraña la propuesta. En un arco de, aproximadamente, 150 Kilómetros de Bilbao existen en la actualidad 8 aeropuertos de mayor o menor tamaño: Santander, Burgos, Logroño, Foronda, Hondarribia, Noain, Biarritz y Bilbao. Puedo decir que, por lo menos en relación a 5 de ellos, he oído en alguna ocasión a grupos de interés o instituciones públicas proponiendo la potenciación de su aeropuerto más cercano mediante la realización de inversiones para su ampliación o la subvención a compañías de bajo coste para que aterrizasen en sus pistas, sin valorar realmente el coste/beneficio de tales medidas. Fuera de este entorno se han dado auténticos despilfarros en inversiones en aeropuertos, baste recordar la cabezonería del aeropuerto de Castellón, o del de Lleida. O la pretensión, ya comentada en este blog, de quien en 2009 era Alcaldesa de Cáceres (95.855 habitantes) de que su ciudad necesitaba un aeropuerto. Por no hablar de las subvenciones Ryanair, en este caso también en Euskadi. Pero, parece que nadie escarmienta en cabeza ajena.