sábado, 30 de noviembre de 2019

Transición, ETA y contrarreforma fiscal en Euzkadi.


La economía es un tema oscuro para la mayoría de la ciudadanía que sólo alcanza a ver sus consecuencias cuando le afectan a su bolsillo. Y esa oscuridad no es fruto exclusivamente de la complejidad de la materia, sino del interés que tienen quienes la dominan en que no se conozca la realidad de algunas cosas con el fin de blanquear con su discurso situaciones que, bien explicadas, nunca serían compradas por la opinión pública. Por eso voy a recordar algunos episodios de la transición, poco conocidos hoy en día, que avalan la calificación de contrarreforma de las intenciones hechas públicas por algunas de nuestras Instituciones Forales.

En 1977 la Unión de Centro Democrático, partido líder de la transición en España, acudió a las primeras elecciones democráticas celebradas en junio de ese año con un programa electoral en el que sostenía que la lucha contra la crisis económica debía venir acompañada de una reforma fiscal que debería asentarse en la lucha contra el fraude fiscal, en la eficacia del impuesto sobre la renta, en evitar que las plusvalías reales y otras fuentes de riqueza escapen a la acción fiscal y en la absorción gradual de la financiación de la Seguridad Social por el Estado. Unos planteamientos que trajeron como consecuencia la aprobación de la Ley 50/1977, sobre medidas urgentes de reforma fiscal. Una ley aprobada en el Senado con el rotundo resultado de 180 votos a favor, 10 abstenciones y ninguno en contra y que incluía tres novedades importantes en el panorama fiscal español: la introducción del impuesto sobre el patrimonio, la tipificación del delito fiscal y la obligatoriedad de la publicación de las listas con las bases imponibles y las cuotas ingresadas por los contribuyentes de renta y de patrimonio. Tras las medidas urgentes, los primeros proyectos de ley con contenido fiscal remitidos a Las Cortes fueron los correspondientes al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, al Impuesto sobre el Patrimonio Neto y al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones.

Resulta curioso ver cómo esos mismos principios siguen vigentes 42 años después, (incluido que el Estado aborde temas hoy financiados por la Seguridad Social) y cómo las primeras medidas que se pusieron en marcha para su consecución, o han sido eliminadas o se están poniendo en cuestión. No existen listas de contribuyentes y los poderes económicos apuestan por una contrarreforma fiscal que suprima los impuestos sobre el Patrimonio y Sucesiones y Donaciones. También en Euzkadi y, lo que es más grave, apoyados por algunas de las Diputaciones.

sábado, 9 de noviembre de 2019

Los ricos también lloran (y al fisco más)



            Acaba de finalizar una campaña electoral donde la mayoría de los medios de comunicación ha dedicado grandes titulares, y la mayor parte de sus páginas y horarios de máxima audiencia, a mítines y debates televisados en los que las principales proclamas han versado sobre quién es el más español de España, cuántas naciones hay en España y cuántos partidos habrá en España si alguna de las formaciones (nunca mejor dicho) que se presenta llega al poder. Temas todos ellos muy distantes de lo que debiera debatirse en unas elecciones. Es decir, de conocer cuáles son las propuestas de gobierno para resolver los problemas que afectan en el día a día al conjunto de la ciudadanía, a partir de acuerdos mayoritarios asentados sobre bases democráticas. Acabamos de salir de una crisis y según parece estamos a las puertas de otra. Nada nuevo si tenemos en cuenta que la economía, como casi todo en la vida, está llena de ciclos. Pero lo preocupante es que no hemos debido aprender las lecciones en términos de democracia, o de ausencia de ella más bien, que nos ha dejado la última. Por ello, no se entiende que no hayan estado sobre el tapete electoral de manera clara y contundente medidas para garantizar una vida digna al conjunto de los ciudadanos y, sobre todo, para disminuir las desigualdades sociales. Quizás porque quienes realmente mandan no se presentan a las elecciones.